Apetitos afilados. Dientes entonados. Oídos hambrientos.

martes, noviembre 27, 2007

A propósito de Devendra

Pedazo de disco el Smokey rolls down Thunder Canyon. Incluso más psicodélico que sus anteriores discos, o más movido, o más setentero o... Imposible de clasificar, ¿quién quiere hacerlo? Devendra sigue su propio camino, real o imaginado, con discos que en principio se parecen pero que luego revelan un mundo entre unos y otros. Y esas producciones que parecen estar a medio camino del low-fi, con su voz atmosférica que parece que sale de cualquier lado, que a veces parece que se va a romper y que se mantiene en una suave fragilidad.


Temazos para el recuerdo: Seahorse, Cristóbal, I remember... A medio camino entre el folk-rock setentero y cualquier cosa.

lunes, noviembre 19, 2007

Independiente

Concierto de Devendra Banhart. Martes 20 de noviembre, 21 horas. Sala Joy Slava, 25 euros. Más indie imposible.

jueves, noviembre 15, 2007

Los mejores discos de 2006 que escuché en 2007

The Tiny - Starring, someone like you. Si "pop de cámara" no fuera una etiqueta estúpida, quizá se podría llamar a lo que hacen estos suecos pop de cámara. Si es que es pop. Sonoridades distintas, puede que raras (pero fáciles de oír), violines y chelos, coros, y una gran voz femenina para un disco plata y blanco. A lo mejor se parece a algo que hayáis escuchado antes. A lo mejor no.




Midlake - The trials of Van Occupanther. De los que recomendó el glasgowiano hace casi un año, fue el que más me llegó (y, junto con el de M. Ward, los que me gustaron). Una auténtica maravilla con una producción casi perfecta, con muchas voces dobladas pero sin causar sensación de pesadez. Pop de raíz americana, pequeño, nostálgico, que no cae en lo obvio sino que se eleva con su calidez y sencillez allá donde sólo los clásicos pueden. We gathered in spring...


Bonnie "Prince" Billy - The letting go. Esto ya es más folk, pero la sensibilidad de este hombre es tal que tienes la sensación de estar escuchando algo tremendamente hermoso pero muy delicado, como un pajarillo que emprende sus primeros vuelos. Se respira profunda honestidad en lo que canta.


Joanna Newsom - Ys. Y llego la reina, ampliando por los caminos menos obvios las ramificaciones del folk, como ya hace su compañero Devendra Banhart. Un arpa y una orquesta, una voz que parece la de ser mitológico como una hada o una elfa. Bueno, ella también parece una elfa. Épica en canciones de diez minutos que nunca pierden la intimidad de unos pies descalzos.


Centro-matic - Fort Recovery. Rock americano del clásico, de ese de raíces. O eso es lo que parece, lo más normal del mundo a la primera escucha, pero gusta, engancha, gana. Lo puedes escuchar en casa y tener la sensación de alguien que te acompaña. Yo quiero que Will Johnson sea mi amigo.

lunes, noviembre 12, 2007

Gente que debería suicidarse por el bien de la música V

Los que escuchan música por el móvil y sin cascos en cualquier transporte urbano. Por diferentes motivos: gusto musical, respeto a los demás y oligofrenia irreversible: la calidad de audio del altavoz de un móvil es una basura. Parece que solo escuchan música para molestar al resto de la gente, lo cual concordaría con su oligofrenia. Esta costumbre parece más acusada en los niñatos y niñatas latinos, aunque los niñatos y niñatas de otras procedencias la han asumido en tiempo récord.

miércoles, noviembre 07, 2007

Hagan sus apuestas

Se acerca el final del 2007 y, sin que sirva de precedente, he escuchado más de cinco discos salidos este año. Para refrescar memorias y prepararnos para rectas finales y futuras listas de lo mejor del año (las odio y adoro, y no por ese orden), aquí van algunos LP's que deberían figurar en muchas de ellas:

- !!!: Myth Takes. Son una debilidad mía, disco perfecto de pies a cabeza, nada falta y nada sobra, el engranaje perfecto para el baile, ritmos sudorosos, sucios y oscuros para no frenar.

- Wilco: Sky Blue Sky. Todo el mundo criticando este disco y a mí me parece una maravilla. No, no es una vuelta a los tiempos del Being There, es algo... distinto, más setentero, una producción preciosa, canciones de medios tiempos y melodías cristalinas, que demuestran que Jeff Tweedy, si no es el mejor compositor de canciones de las últimas décadas, no le falta mucho. Todo está deliciosamente en su sitio y escucharlo da una rara satisfacción.

- Björk: Volta. Vale, no es el mejor disco de Björk; ¿y a quién le importa? Siempre original pero con mucho más detrás, las idas de olla de la islandesa son de lo mejor que le puede pasar a la música.

- Elliott Smith: New Moon. Sí, el tío está muerto y son descartes de sus anteriores discos, pero ojalá que todas las caras A de los grandes artistas fueran tan buenas. Y esas guitarras acústicas de puro folk, y esas voces dobladas, y las tímidas incursiones de otros instrumentos. Merece la pena.

- Kings of Leon: Because of the times. No es lo mejor que han hecho, pero tiene grandes canciones y un trallazo como Charmer.

- Jens Lekman: Night falls over Koverdala. Si juntas a Richard Hawley con los Flaming Lips...

- Animal Collective: Strawberry Jam. Más raros que un perro verde pero uno de los pocos grupos que tiene personalidad propia... y un disco lleno de grandes, y rabiosamente alocadas, psicodélicas, canciones.

- Panda Bear: Person Pitch. Una de las partes contratantes de los anteriores, con una cosa que parece una mezcla entre los Beach Boys y las músicas del mundo de mediados de los 90, esas llenas de misticismo. Lo raro es que mejor no ha podido salir.

- Interpol: Our love to admire. Lo pongo aquí porque es de Interpol y tiene unas cuantas buenas canciones. Pero me gusta la portada.

- Radiohead: In Rainbows. Todavía no he tenido tiempo de escucharlo plenamente, pero ¿alguien duda acaso de que esté por derecho propio entre lo mejor del año?

- Arcade Fire: Neon Bible. La hostia. Punto.

- Richmond Fontaine: Thirteen cities. Uno de estos discos que tienen de todo, y todo bueno. A mí que el rock sureño me tiraba para atrás, pero este disco ralla a la altura de los clásicos.

- Los Planetas: La leyenda del espacio. Uno de los pocos discos españoles que he escuchado este año. Eso sí, lo he quemado a conciencia. Es increíble que sea tan personal, tan fantástico, cuando creíamos que a esta banda solo le quedaba emprender la cuesta abajo. Rock planetero con feeling flamenco, y queda perfecto.

- M.I.A.: Kala. No lo he escuchado apenas, pero promete si te olvidas de que puede ser la típica música taladro... en Sry Lanka.

Hasta aquí de momento, fuera quedan discos que no me han parecido tanto, que se me han olvidado en estos momentos, me falta por escuchar o simplemente ni conozco. Estoy abierto a sugerencias.

lunes, noviembre 05, 2007

Recuperando clásicos: Urban Hymns

En agosto, mientras pasaba tres semanas en Nueva York, compré la Uncut, aunque es una revista más británica que las fish & chips. En su sección de clásico del mes aparecía un LP de hace diez años (justo los que tiene la revista), el Urban Hymns de The Verve, con el que el grupo de Richard Ashcroft llegó a lo más alto de las listas de éxitos gracias al bombazo de Bittersweet Simphony (que, por cierto, no es una canción de Jagger y Richards, pese a lo que los créditos digan). Lo ponían de obra maestra absoluta, aunque la primera vez que llegó a mis manos, en un cassette original y de la mano de un amigo fan de Oasis, no terminó de engancharme, pese a temazos como la citada, Sonnet, Drugs don't work o Lucky man. Quizá me esperaba algo más digerible y no tan psicodélico, tan denso (esa búsqueda de pop fácil hizo que también despreciara en ese momento discos como el Dog Man Star de Suede). Un directo que pusieron en La 2 en aquel momento, más oscuro que el disco, del cual solo tocaban un par de temas, terminó por traumatizarme.

Esta semana he decidido darle una nueva oportunidad a los chicos de Ashcroft (cuya carrera en solitario se diluyó demasiado deprisa). Ahora me entra muchísimo mejor, veremos qué tal asienta en mi cabeza. Pero siempre es agradable recuperar esos sonidos cristalinos del pop británico de mediados de los 90.

jueves, noviembre 01, 2007

Últimamente

Hacía ya mucho tiempo de todo esto. Ordenadores estropeados impidieron la regularidad, ahora sólo queda que esa función la cumpla el fantasma de la pereza.

Sería casi imposible describir todos mis cambios de humor musicales durante esa travesía por el desierto blogger, sólo puedo decir que en el último mes (octubre) he pasado de recuperar los viejos clásicos (Led Zep, Black Sabbath, The Doors, The Who... y, por supuesto, The Beatles) a escuchar casi exclusivamente música clásica, jazz y flamenco, Ravel, Miles Davis y Camarón.

Ahora mismo estoy escuchando a !!!. ¿Tendrán estos cambios que ver con estados anímicos?